Copla real castellana
Estaba en la soledad
y me diste compañía;
tuve tu mano en la mía,
tierna prenda de amistad.
Unas gotas de dulzura
bastaron a disolver,
dispersar, desvanecer
un tremedal de amargura.
Aproximación a la Poesía desde la Ciencia y/o dulcificación de la Ciencia a la luz de la Poesía
Copla real castellana
Estaba en la soledad
y me diste compañía;
tuve tu mano en la mía,
tierna prenda de amistad.
Unas gotas de dulzura
bastaron a disolver,
dispersar, desvanecer
un tremedal de amargura.
Referencia de imagen: http://etc.usf.edu/clipart/1400/1462/hera_2_md.gif
Fue Zeus – Theus - Deus, fue su Hermano
Quien la violó, de Cuco travestido,
Quien tras de ese arrebato incontenido
de ser su Esposo le ofreció la mano.
Hijos ambos de Crono, y Él de Urano,
la Madre Tierra decoró su nido
con un jardín en oro frutecido,
de naranjos: el Áureo Manzano.
Duró el sueño nupcial trescientos días
por las colinas cálidas de Samos,
que albergaron los sacros regocijos.
Allí fueron retozos y alegrías
so el naranjal: azahar y verdes ramos.
Y concibió la Diosa sus tres hijos.
Respuesta a una controversia mantenida en un foro de poesía con el contertulio D, acerca del uso de métrica y rima en la composición.
Hermosa contestación, D, pero poco convincente para mí. Que quiere usted que le diga yo, que soy un cantarín, me he pasado la mayor parte de mi vida cantando "a capella", sin acompañamiento. Se puede cantar, como yo, La Traviata "a capella", imaginándose la orquesta, igual que se puede bailar la Danza del Fuego al compás de una flauta de caña. El resultado son vicios: uno se sale de ritmo, alarga indebidamente donde quiere, se engolfa en la melodía y el resultado es inarmónico y confuso. Así me sucedía a mí en el canto cuando me cogió, ya muy tardíamente, mi maestra de canto Olga Manzano. Tuvo que usar toda su paciencia infinita para irme metiendo en el ritmo y la armonía, porque yo era casi ciego a todo ello. Y cuando pude comparar el resultado del antes con el después, mi canto primero me resultaba casi insufrible. Y en la poética como en la oratoria de la que procede el ritmo existe tanto en verso medido o rimado como en el llamado libre (¡oh dioses! ¿por qué?). Y ese ritmo lo marcan los acentos y las pausas o cesuras, y lo remarca en su caso la rima. Un poeta que prescinda de todo ello podrá acertar sólo si es muy bueno, pero en el resto de los casos, falto de andaderas, producirá bodrios como castillos, inarmónicos y gratuitos. Para mí poesía es la armónica fusión de forma y fondo oratorios: medida, rima o no, sintaxis correcta, alto dominio de la retórica ... e inspiración, por supuesto. En fin, D, por mi parte zanjo el asunto dejando en el aire uno de los tipos de composición más enredados: "el ovillejo". En su sitio lo hallarás. Gracias por la controversia y un abrazo,
Usara medida y rima
Ovillejo
Por que mi pecho cantara
(USARA),
los ritmos que el verso anida,
(MEDIDA),
y los finales que estima,
(Y RIMA).
Sin grillete que lo oprima,
para dar mi sentimiento
al libre caudal del viento
USARA MEDIDA Y RIMA.(Tormenta sobre el Miño)
El agua sueña en la nube
que es almohada de los ángeles
o yacija de un querube
o el airón de los arcángeles.
Y mientras sueña que sueña
se le enfrían los diamantes,
se le cabrean los humos
en nubarrones tonantes;
lo que fue vellón tranquilo
cobra aspecto amenazante,
que blasfema por el trueno,
y en el relámpago arde.
El leve jirón de niebla
engruesa y se torna grave,
y, cargado de razones,
llueve en gotas verticales.
Y en esta caída acaba
aquel sueño sobre ángeles,
que sobre el Miño se trueca
en impactos circulares.
Circunferencias excéntricas,
mutuamente intersectantes:
(caótica geometría
de caídas humedades)
derivan lánguidamente,
a orillas de junco y salce
entre el latir melancólico
de las frondas alisales.
Es diosa del Hogar, la que conserva
la Paz que cicatriza tanta herida,
Quien del altar sagrado de la Vida
la Llama guarda y el Calor preserva.
Es Aquella que, ajena a la caterva
furiosa o lujuriosa empedernida
que profana la olímpica guarida,
casta se muestra y virgen se reserva.
Por ello, entre las diosas venerada,
su fuego duradero, inextinguible,
alma de la familia, se custodia:
seguro puerto, cálida morada,
flor de felicidad inmarcesible,
aliento fraternal que a nadie odia.