A Lily, que siempre está,
y a don Pedro que va y viene
y, entre que viene y que va,
lo mejor que tiene da
al tiempo que se entretiene;
que cuando afición se tiene
aunque lo llamen de allá
el deber que lo retiene
poco tiempo lo contiene
y, al fin, se vuelve p’acá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario