sábado, 14 de septiembre de 2013

Seguidillas de mi Granada

Yo moría de amores
por mi Granada:
el Aljibe de Trillo
de madrugada.
Cuanto daría
por respirar jazmines
cuestas arriba.

Cristiano no me veo,
tampoco moro,
de Granada me digo,
su encanto añoro.
¡Ay, quien pudiera
ver nacer de sus cumbres
la luz primera!